FEDERACION ESPAÑOLA DE MUNICIPIOS Y PROVINCIAS

22 Noviembre 2024

Apoyo a la salud mental de los desempleados

Aliviar los trastornos en el estado de ánimo de las personas desempleadas, prevenir adicciones, reforzar su autoestima o mejorar su apoyo familiar o social son algunas de las posibilidades de actuación municipal ante los problemas de salud mental que la falta de empleo ocasiona a numerosas personas y familias. La FEMP ha elaborado un modelo de programa en el que se apuntan las pautas de actuación para que los Ayuntamientos puedan paliar o limitar las dolencias mentales derivadas del paro.



Ayudar al desempleado y a las personas con riesgo elevado de desempleo a mantener un buen estado de bienestar mental y social”, de manera que éste pueda acometer las presiones de su situación laboral sobre su bienestar mental, conservar su potencialidad profesional y social, y mantener su contribución a la comunidad, es el objetivo que concreta el Programa Tipo de Actuación Municipal sobre Salud Mental en el Ámbito del Desempleo.

 

El Programa es una propuesta que se encuadra en el ámbito de la promoción de la salud mental del colectivo de desempleados; no trata en modo alguno la atención sanitaria en materia de salud mental –una competencia de las Comunidades Autónomas-, sino que busca aprovechar la red de servicios que ya existen en el ámbito local en áreas de salud, ocupación, actividad sociocultural, tratamiento y control de adicciones o servicios sociales para trabajar con este sector de población.

 

Según destaca el texto de la propuesta, la solución a los problemas ligados a la salud mental y debidos al desempleo pasa por la generación de una actividad económica que promueva la contratación laboral; pero mientras no se genere esa actividad o no sea posible alcanzar las tasas necesarias de contratación, se hace necesario aplicar programas que limiten las dolencias de los desempleados en el ámbito de la salud mental. Es en este marco donde la propuesta de programa de la FEMP encuentra su aplicación.

 

Destinatarios y mecanismos de funcionamiento

 

La aplicación del programa, de ámbito local, está prevista para el colectivo de desempleados –con establecimiento de diferencias si se trata de hombres, mujeres o jóvenes- y para las personas con elevado riesgo de desempleo.

 

El programa se asienta sobre diversos principios. Uno de ellos es que los trastornos mentales –en lo que al trabajo se refiere- se manifiestan en situación de desempleo, precariedad en el trabajo y en situaciones de alto riesgo de pérdida de éste; la actuación ante los trastornos mentales ocasionados por el desempleo requiere la intervención del conjunto de la comunidad y también el apoyo familiar y social al desempleado, según rezan otros principios estructuradores del programa; otros principios se refieren a la actividad física como fuente de bienestar físico y mental para el desempleado; y también al incremento de los trastornos sobre la autoestima, la ansiedad, el estado de ánimo o las adicciones entre el colectivo desempleado.

 

La Administración Local será la entidad que articulará la realización del programa en su territorio. En cuanto al eje vertebrador del programa, éste estará compuesto por las entidades públicas en los ámbitos de la salud y el trabajo.

 

La propuesta de programa formulada por la FEMP contempla la participación organizada de diversas entidades. Por un lado, figuran las “entidades cooperantes” del programa: se trata de entidades públicas y privadas que, voluntariamente, se unen para paliar el sufrimiento mental de los ciudadanos por encontrarse desempleados. A otras entidades sensibles a estos problemas de salud mental, pero no “cooperantes” se les denomina “entidades colaboradoras”.

 

Las entidades públicas cooperantes pueden ser las tres Administraciones en sus áreas de salud, laboral, sociocultural, de servicios sociales y prevención, control y tratamiento de adicciones; de estas áreas, las correspondientes a salud y laboral serán las que actúen como vertebradoras del programa.

 

Las entidades privadas cooperantes abarcan a toda la sociedad civil, desde colegios profesionales y facultades que tratan la salud mental, hasta asociaciones de enfermos y de familiares de enfermos, clubes deportivos, asociaciones culturales y sociales, de la juventud, de la familia, igualdad y adicciones, entre otras.

 

La propuesta de programa contempla cuatro órganos de intervención; en primer lugar, el Observatorio, que aglutina a todas las entidades relacionadas con el desempleo y la salud mental en el ámbito local y que es el órgano de diagnosis de la situación y de consulta de otro órgano, el Comité de Cooperación, en el que se integra a las entidades cooperantes y cuya finalidad es aprobar la planificación estratégica, gestión anual y evaluación del programa.

 

La Dirección de Cooperación es el tercero de los órganos; se encargaría de la gestión ejecutiva y, para el desarrollo de su trabajo, contaría con el apoyo del equipo técnico de intervención, integrado por el conjunto de técnicos y personal aportado al programa por las entidades cooperantes.

 

Un extenso campo de actividades

 

Junto al objetivo general, la propuesta de la Federación detalla once objetivos específicos (ver cuadro) que marcan la pauta para las líneas de trabajo y actividades del programa.

 

La primera de ellas, relacionada con la información a la población afectada sobre la pérdida de empleo, tiene como finalidad que el colectivo desempleado o en riesgo de pérdida de su trabajo esté correctamente informado de su situación. Para ello, y con contenidos específicos según se trate de varones, mujeres o jóvenes, se explicará a los afectados cómo es su nueva situación, los problemas que puede desencadenar en el entorno familiar, el peligro de las adicciones, la necesidad de apoyo familiar y social, los peligros que conlleva o los recursos que la comunidad le brinda; en concreto, los recursos de ayuda en la búsqueda de empleo o los relacionados con la salud mental, entre otras cuestiones.

Los instrumentos para desarrollar esta intervención informativa serían los folletos disponibles en las oficinas de empleo, agencias de gestión de empleo privadas, instalaciones sanitarias públicas y privadas y también en internet; asimismo, y para aquéllos que lo deseen, se podrán programar talleres para profundizar en los contenidos de la actividad.

 

El segundo gran capítulo de actividades contemplado en el programa se dirige a las familias de los desempleados al objeto de contener la problemática doméstica e impulsar el apoyo familiar al desempleado. En este caso, los instrumentos de actuación son talleres dirigidos a los familiares.

 

El apoyo social es el tercero de los pilares: para el desempleado es fundamental ampliar su red de contactos y relaciones sociales y ocupar su tiempo libre; la propuesta de la FEMP pasa por fomentar instrumentos de la Administración Local, incluso de la autonómica, e iniciativa privada, como clubes, talleres, o cursos relativos a cualquier iniciativa social –manualidades, senderismo, idiomas, fotografía, etc.- para el desarrollo físico, intelectual y sobre todo, social, del desempleado. En caso de no existir un instrumento creado para iniciativas de este tipo, se recomienda propiciar la creación de un grupo que la desarrolle mediante una estructura organizativa de la Administración y/o la iniciativa privada utilizando, por ejemplo, las plataformas de redes sociales gratuitas de internet.

 

El programa contempla también el desarrollo de una buena actividad física que contribuya al bienestar del desempleado; se trata del cuarto capítulo de actuaciones; para ello, se buscará fomentar la utilización de las diferentes instalaciones deportivas locales y autonómicas, e impulsar la asociación deportiva ciudadana –clubes, asociaciones, etc.-.

 

El tratamiento de la autoestima y el de la ansiedad –actuaciones quinta y sexta-, la propuesta formulada por la Federación incluye el tratamiento de los sentimientos de vergüenza, inseguridad, fracaso, culpa, degradación social o similares producidos por la situación de desempleo, en el caso de la autoestima, y del malestar mental, la agitación, la inquietud o la angustia que genera en el desempleado la falta de control de los sucesos, en lo que respecta a la ansiedad. Las perturbaciones del estado de ánimo, los trastornos del sueño y la prevención de adicciones son las otras líneas de actuación previstas; en estas situaciones, con los instrumentos disponibles se impulsan talleres con equipos especializados en el tratamiento de estas afecciones.

 

Los trastornos mentales más graves son la base de otra línea de actuación: la derivación del desempleado afectado y de sus familiares a los servicios asistenciales de salud y servicios sociales; la derivación, lógicamente, deberá tener carácter voluntario, mediante solicitud por parte de los afectados.

 

Recursos del programa

 

La propuesta contempla como recursos del programa las aportaciones en recursos humanos y materiales de las entidades cooperantes, incluidos los procedentes de los programas de fomento de empleo, del voluntariado social y los propios desempleados. La puesta en funcionamiento de un programa específico para prevención y promoción de la salud mental de personas en esta situación puede contar también con una nutrida red de servicios que ya existe en el ámbito local.

 

Según detalla el programa, entre otros, se trata de los servicios y dependencias público-privado son los servicios de Atención Primaria y Salud de las Comunidades Autónomas, los servicios de atención de la Salud Mental para Adultos, los servicios municipales de Salud Pública, los de ocupación, los servicios sociales, y los servicios y dependencias culturales, deportivos o entidades de autoayuda. Asimismo, se apuntan colegios profesionales, sindicatos y asociaciones de empresarios.

 

El contenido completo de este modelo de Programa tipo de actuación municipal sobre Salud Mental en el Ámbito del Desempleo, puede solicitarse al Área de Salud de la FEMP.

 
Apoyo salud mental desempleados

Apoyo salud mental desempleados

Carta Local nº 383, octubre 2024.pdf