Para el funcionamiento de las grandes ciudades, el crecimiento de nuevas industrias y tecnologías de la información son cada vez más importantes. Por ello, la innovación y el progreso tecnológico son fundamentales para descubrir soluciones duraderas para los retos económicos y medioambientales. A nivel mundial, tal y como señala la ONU “la inversión en investigación y desarrollo (I+D), como porcentaje del PIB, aumentó de un 1,5% en 2000 a un 1,7% en 2015, y continuó casi en el mismo nivel en 2017”. Sin embargo, destacan, “en las regiones en desarrollo fue inferior al 1%”. Por ello reclaman “acelerar el desarrollo de los sectores manufactureros si desean conseguir la meta de 2030”.
En cuanto a las comunicaciones, el PNUD señala que “más de 4.000 millones de personas aún no tienen acceso a Internet y el 90 por ciento proviene del mundo en desarrollo”, y aunque casi toda la población global viva en un área con cobertura de red móvil, “reducir esta brecha digital es crucial para garantizar el acceso igualitario a la información y el conocimiento, y promover la innovación y el emprendimiento”, explica la ONU.
En España, el sector industrial tiene el reto de, indican desde la Secretaría de Estado para la Agenda 2030, “transitar hacia una industria cada vez más sostenible, garantizando su viabilidad, y adicionalmente acometer su transformación digital, hacia una industria 4.0”. Con el objetivo de “aumentar de manera significativa la contribución de la industria al empleo y al producto interior bruto”, explican.
Por estas razones la ONU ha establecido las siguientes metas:
9.1 Desarrollar infraestructuras fiables, sostenibles, resilientes y de calidad, incluidas infraestructuras regionales y transfronterizas, para apoyar el desarrollo económico y el bienestar humano, haciendo especial hincapié en el acceso asequible y equitativo para todos.
9.2 Promover una industrialización inclusiva y sostenible y, de aquí a 2030, aumentar significativamente la contribución de la industria al empleo y al producto interno bruto, de acuerdo con las circunstancias nacionales, y duplicar esa contribución en los países menos adelantados.
9.3 Aumentar el acceso de las pequeñas industrias y otras empresas, particularmente en los países en desarrollo, a los servicios financieros, incluidos créditos asequibles, y su integración en las cadenas de valor y los mercados.
9.4 De aquí a 2030, modernizar la infraestructura y reconvertir las industrias para que sean sostenibles, utilizando los recursos con mayor eficacia y promoviendo la adopción de tecnologías y procesos industriales limpios y ambientalmente racionales, y logrando que todos los países tomen medidas de acuerdo con sus capacidades respectivas.
9.5 Aumentar la investigación científica y mejorar la capacidad tecnológica de los sectores industriales de todos los países, en particular los países en desarrollo, entre otras cosas fomentando la innovación y aumentando considerablemente, de aquí a 2030, el número de personas que trabajan en investigación y desarrollo por millón de habitantes y los gastos de los sectores público y privado en investigación y desarrollo.
9.a Facilitar el desarrollo de infraestructuras sostenibles y resilientes en los países en desarrollo mediante un mayor apoyo financiero, tecnológico y técnico a los países africanos, los países menos adelantados, los países en desarrollo sin litoral y los pequeños Estados insulares en desarrollo.
9.b Apoyar el desarrollo de tecnologías, la investigación y la innovación nacionales en los países en desarrollo, incluso garantizando un entorno normativo propicio a la diversificación industrial y la adición de valor a los productos básicos, entre otras cosas.
9.c Aumentar significativamente el acceso a la tecnología de la información y las comunicaciones y esforzarse por proporcionar acceso universal y asequible a Internet en los países menos adelantados de aquí a 2020.