FEDERACION ESPAÑOLA DE MUNICIPIOS Y PROVINCIAS
Noticias
Nuevos gobiernos municipales
Los resultados de las pasadas elecciones municipales han traído a los Consistorios españoles la presencia de nuevas fuerzas políticas y, sobre todo en ciudades grandes y en la práctica totalidad de capitales de provincia, la ausencia de mayorías absolutas.
Estas nuevas Corporaciones Locales van a encontrarse con Ayuntamientos fuertes y saneados, fruto del esfuerzo y del trabajo que, a lo largo del mandato que acaba, los equipos ahora en funciones han conseguido alcanzar.
Desde el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas así se ha reconocido, y a la hora de hacer balance, el Ejecutivo ha vuelto a insistir en que el buen hacer de la Administración Local española se ha plasmado en una más que significativa reducción de la deuda financiera (que disminuyó casi 4.000 millones de euros) y una adecuación de su Periodo Medio de Pago a Proveedores. Huelga repetir una vez más los buenos resultados en materia de superávit y la posición de “buenos gestores” que los municipios nos hemos ganado a pulso. Esta nueva situación de la Administración Local, de generalizada bonanza financiera, va a permitir, al amparo de
la LRSAL, que los Ayuntamientos puedan atender las necesidades de sus vecinos, destinando buena parte de sus disponibilidades económicas a gasto social.
Y más allá, no podemos dejar de insistir en los resultados del informe de Standard&Poor’s sobre la solvencia de los municipios españoles, que ya anunciábamos en nuestra anterior edición y que en ésta desarrollamos más ampliamente.
Este nuevo mandato que arrancará en junio será también el de la plena aplicación de la Ley de Bases de Régimen Local tras las modificaciones incorporadas por la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, y de otras normas, como las relacionadas con la transparencia y el acceso a la información pública. Será igualmente el ejercicio económico en el que ha entrado en funcionamiento la facturación digital y en el que, según el seguimiento realizado por la FEMP, el compromiso de las Entidades Locales ha sido completo: la práctica totalidad de ellas disponen al menos de un punto de entrada de factura electrónica, y esta circunstancia es una muestra más de que estamos preparados para afrontar el futuro con nuevos medios y nuevas normas que repercutirán en los próximos cuatro años en mandatos más transparentes y participativos.
Íñigo de la Serna Hernáiz
Presidente de la FEMP
Desde el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas así se ha reconocido, y a la hora de hacer balance, el Ejecutivo ha vuelto a insistir en que el buen hacer de la Administración Local española se ha plasmado en una más que significativa reducción de la deuda financiera (que disminuyó casi 4.000 millones de euros) y una adecuación de su Periodo Medio de Pago a Proveedores. Huelga repetir una vez más los buenos resultados en materia de superávit y la posición de “buenos gestores” que los municipios nos hemos ganado a pulso. Esta nueva situación de la Administración Local, de generalizada bonanza financiera, va a permitir, al amparo de
la LRSAL, que los Ayuntamientos puedan atender las necesidades de sus vecinos, destinando buena parte de sus disponibilidades económicas a gasto social.
Y más allá, no podemos dejar de insistir en los resultados del informe de Standard&Poor’s sobre la solvencia de los municipios españoles, que ya anunciábamos en nuestra anterior edición y que en ésta desarrollamos más ampliamente.
Este nuevo mandato que arrancará en junio será también el de la plena aplicación de la Ley de Bases de Régimen Local tras las modificaciones incorporadas por la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local, y de otras normas, como las relacionadas con la transparencia y el acceso a la información pública. Será igualmente el ejercicio económico en el que ha entrado en funcionamiento la facturación digital y en el que, según el seguimiento realizado por la FEMP, el compromiso de las Entidades Locales ha sido completo: la práctica totalidad de ellas disponen al menos de un punto de entrada de factura electrónica, y esta circunstancia es una muestra más de que estamos preparados para afrontar el futuro con nuevos medios y nuevas normas que repercutirán en los próximos cuatro años en mandatos más transparentes y participativos.
Íñigo de la Serna Hernáiz
